a. Maquilla tu rostro al completo.
b. Unifica el tono de la piel, hace desaparecer pequeñas imperfecciones y signos de sueño y cansancio.
c. Aporta un efecto cara lavada al instante.
Sí, amiga mía, la respuesta buena es la B. Utilizar el iluminador tiene muchas ventajas. Y aquí un tip de última hora: puedes mezclar el iluminador con tu crema hidratante o con tu base para que el acabado sea un maquillaje supernatural. Aplícatelo siempre con buena luz, ¡que no queremos sustos!
¿Qué tal te ha ido? Si has acertado todas significa que hace tiempo que perdiste el miedo al momento “cómo aplicar el iluminador facial” y a estas alturas ya estas hecha una experta (o casi); pero si el test no te ha salido bien, no pasa nada, empóllatelo como haces con las cosas importantes —porque esta definitivamente lo es— y empieza a convertir las sombras en luces.