Retinol y niacinamida: ¿se pueden usar juntos estos dos activos?

Todos los expertos en piel tienen claro que el retinol es el activo antiedad más completo. Sin embargo, hace relativamente poco le ha salido un arduo competidor: la niacinamida. La buena noticia es que ahora ya no es necesario elegir uno u otro para tener la piel joven, sino que se pueden mezclar retinol y niacinamida en la rutina de belleza nocturna para optimizar los resultados. Eso sí, hay que seguir una serie de pautas y tener especial cuidado con la exposición solar.

La niacinamida es un ingrediente antioxidante con un gran poder humectante que reduce la pérdida de agua transepidérmica. También conocida como vitamina B3, es cada vez más recomendada por los dermatólogos gracias al poder que tiene para calmar e iluminar, creando un cutis más uniforme y saludable.

No solo es capaz de retener el agua en la piel, sino que entre sus conocidas propiedades destaca que es, despigmentante (inhibe la transferencia de melanina dentro de la piel), seborreguladora y que también ayuda en el proceso de reparación de la barrera cutánea; por lo que ayuda a reducir rojeces, manchas, arruguitas y posibles marcas de acné. ¿Lo mejor? La niacinamida un ingrediente perfecto para ti si tienes la piel grasa, con tendencia acnéica o sensible.

Como la función principal de este activo antiedad es aumentar la renovación celular, consigue eliminar la capa más superficial de la piel de forma rápida y con resultados muy evidentes. En poco tiempo el cutis tiene un aspecto más rejuvenecido y luminoso. Eso sí, el retinol requiere ir acompañado de un buen protector solar (SPF30, como mínimo) durante el día.

Su principal función es la de mejorar la renovación celular, que disminuye con el paso de los años pero, además, estimula la creación natural de colágeno y elastina para que la dermis gane en firmeza, reduce las arrugas, disminuye las manchas de pigmentación y mejora la textura. La única pega que tiene el retinol es que es bastante irritativo, por lo que requiere de un proceso de adaptación que comienza con un uso más lento y progresivo, con concentraciones más bajas, sobre todo en pieles sensibles.

Hay que tener cuidado a la hora de mezclar ingredientes en nuestra rutina de belleza, ya que una mala combinación puede dar un resultado no óptimo o cierta irritación en la piel. Por ejemplo, el mix de varios activos irritantes pueden alterar la barrera cutánea, momento en el que rojeces, picor o sequedad pueden hacer su aparición.

En cambio, niacinamida y retinol juntos hacen el ‘match’ antienvejecimiento definitivo. Ambos están presentes en Crema de noche Revitalift Laser Press Cream Retinol + Niacinamida de L’Oréal Paris, cuya fórmula combina estos ingredientes con ácido hialurónico, péptido, pantenol y glicerina para un confort óptimo. En un solo gesto la crema corrige visiblemente las arrugas, el tono desigual de la piel e hidrata intensamente, mientras que su textura no grasa se absorbe rápidamente, dejando la piel lisa y suave. 

Preservada en un tarro aséptico –basta con presionarlo para liberar una dosis óptima de producto–, cuenta con una innovadora tecnología de crema pulsada que “presiona” los activos en un tratamiento de noche intensamente hidratante pero ligero.

Si quieres obtener resultados óptimos es mejor que aumentes gradualmente el uso de la crema de noche Revitalift Laser Pressed Cream Retinol + Niacinamida, para que la piel se acostumbre a los efectos del retinol, ya que es un activo bastante potente. Toma nota de cómo debes hacerlo:

• Semana 1
  Extiende una presión del producto, del tamaño de un guisante, en todo el rostro solo dos noches por semana, asegurándote de evitar el área de los ojos. Utiliza una segunda presión igual para el cuello y el escote. 
• Semana 2 
  Aplica la misma cantidad de crema (una presión para en el rostro y otra en el cuello y el escote), cada dos noches.
• Semana 3
  Si ves que tu piel tolera adecuadamente la crema, puedes comenzar a aplicarla todas las noches.
   
  Eso si, ten en cuenta que cuando utilices la crema debes evitar la exposición intencionada al sol y a los rayos UV artificiales, ya que la piel puede estar más sensible. Y no te preocupes si experimentas cierto enrojecimiento, hormigueo o sequedad iniciales, porque es normal cuando se utiliza retinol. Si esto ocurre, deja de usar la crema durante unos días y luego utilízala con menos frecuencia.