Prepara la piel para el verano

El verano ya llega: es hora de preparar nuestra piel para disfrutar de los rayos de sol.

Los días se alargan y son más soleados al tiempo que la temperatura sube... ¡Te están llamando las faldas cortas y las extremidades bronceadas! Pero tienes que preparar la piel para el verano si vas a presumir de una preciosa luminosidad dorada.
CONSEJO
1

¿Tu prioridad número 1? ¡Tápate!

En cuanto suben las temperaturas, tenemos que sacar las cremas de día que contienen FPS. No esperes a que lleguen los días de calor abrasador o a irte de vacaciones a la playa: ¡entre el 5 y el 10 % de los rayos UV penetra las nubes! Así que, cuando la primavera haya llegado, protege tu piel religiosamente. Incluso aunque solo tengas planeada una comida al aire libre, lleva siempre un protector solar de tamaño viaje en el bolso para aplicarlo en cuanto el sol empiece a asomar.  Las cremas de día que contienen FPS forman una barrera protectora que ayuda a: - que los rayos UV no ataquen las células de la dermis, - evitar las quemaduras, - ralentizar el envejecimiento de la piel, ya que el sol suele ser el causante número 1 - evitar la aparición de manchas de la edad provocadas por el sol, - reducir el riesgo de cáncer de piel.
CONSEJO
2

Prepara la piel para el sol

Para una limpieza rápida y eficaz, empieza con un exfoliante. Exfolia con regularidad: de una a tres veces a la semana según tu tipo de piel. Esto eliminará las células muertas de la piel, la suciedad y el rastro de contaminación. A nuestra piel le ha costado renovarse durante el invierno, así que exfoliarla elimina las toxinas que se han acumulado durante los meses más fríos. Aplica un exfoliante para limpiar la piel húmeda y despertar tu epidermis, fomentar la circulación y poner en marcha la renovación celular.
CONSEJO
3

Consigue una luminosidad dorada antes del verano

¿El arma secreta? Una crema BB te aportará un brillo sutil y veraniego. Las BB cream se diferencian de las bases en que ofrecen una cobertura ligera sin atiborrarla. Las BB cream ofrecen varios beneficios para la piel: la hidratan, suavizan, corrigen y protegen de los rayos UV. Los protectores solares en forma de BB cream suelen contener un FPS de entre 20 y 50. Son fáciles de aplicar y dejan nuestra piel instantáneamente radiante y suave. Son como un billete de ida a una piel fresca en cuanto aparezca el sol.