Qué hacer y qué evitar al hidratarte en verano

A medida que aumentan las temperaturas, también lo hace nuestro factor de luminosidad. Pero, a pesar del deslumbramiento, seguimos necesitando utilizar un producto hidratante y hay una gran cantidad de opciones ligeras y frescas de entre las que escoger: cremas, sérums, lociones, brumas, etc.

CONSEJO
1

Hidrata en vez de alimentar

Algunos dejamos de utilizar las cremas de día durante el verano. ¡Gran error! Sea invierno, verano, llueva o haga sol, nuestra piel siempre necesita su dosis diaria de hidratación. Puede hidratarse con el agua que absorbe de nuestra circulación sanguínea, pero eso casi nunca es suficiente. La piel del verano necesita componentes hidratantes que se mantengan frescos y rellenen el tejido con suficiente agua para que dure todo el día. El calor hace que la piel sude y segregue sebo. Puede que no queramos nutrir la piel, pero deberíamos saciar su sed.
CONSEJO
2

Escoge la fórmula adecuada

Los laboratorios de productos para el cuidado de la piel dominan el arte de crear texturas ligeras como una pluma. Todo empezó con productos asiáticos, diseñados para mujeres que viven en climas húmedos, cálidos y que provocan brillos. Esto resultó en unos productos superligeros e hidratantes como, por ejemplo, el agua cosmética. El agua cosmética (o tratamiento líquido) contiene unos componentes absorbentes y matificantes que no sobrecargan la piel. Friegan el exceso de sebo literalmente. Y, afortunadamente para nosotros, ¡ha llegado a los estantes europeos!
CONSEJO
3

Utiliza los productos hidratantes a capas

El agua cosmética puede aplicarse directamente sobre la piel. Utilizarla es pan comido: tan solo tienes que aplicarla después de tu limpieza matutina. Puede que sea nueva para nosotros, pero las mujeres asiáticas la usan para combatir instantáneamente cualquier sequedad causada por la limpieza o los baños. También prepara la piel para que pueda absorber los otros tratamientos que le apliquemos. Si lo necesitas, puedes aplicar un sérum que hidratará la piel y le aportará una gran cantidad de ingredientes activos buenos para el cutis. Tanto si utilizas un sérum como si no, sigue tu limpieza con una crema de día ligera, ya que la idea es que puedas darte un buen baño de agua y no sofocarte con ingredientes nutritivos.
CONSEJO
4

Hidrata sin dejar la piel reseca

Las brumas de agua mineral hidratantes dejan la piel fresca, pero son todo un arte. Aplica la bruma en el rostro, pero limpia el exceso de agua con un pañuelo. No dejes que tu rostro se seque al viento: una reacción osmótica solo secará todavía más la piel.
CONSEJO
5

Protege la piel al tiempo que la hidratas.

Si utilizas un protector solar, opta por uno que contenga agentes hidratantes. O aplica una crema hidratante justo antes del protector solar. Deberías hacer lo mismo para el cuerpo. Aplica la crema hidratante por la mañana, mediodía y noche. Sudamos un montón durante el verano, así que utiliza una crema hidratante ligera durante el día para combatir cualquier pérdida de agua.