Si iluminas tu mirada así parecerá que has dormido ocho horas
Tener la mirada a punto es lo primero para presumir de buena cara. Contorno, iluminador de ojos, máscara de pestañas... ¡Que surja la magia!
Tener la mirada descansada es la primera condición si quieres presumir de ‘buena cara’. Pero ya sabemos que a veces no te da la vida y dormir ocho horas es un sueño inalcanzable. ¡Para eso estamos nosotras! Para ponerte in touch con unos productos que iluminarán tu mirada casi por arte de magia. Contorno de ojos, iluminador, máscara de pestañas… ¡no te quedes a medias y sigue leyendo!
Te levantas y no ha sido tu mejor noche —o lo mismo sí, pero no has descansado lo suficiente— y tienes una reunión, una entrevista o un día completito en el que quieres estar guapa sin que la fatiga presida tu cara. Pues claro y en botella. ¡Vamos a preparar un neceser de emergencia! Necesitas: un contorno de ojos que te devuelva la dignidad, unas gotas iluminadoras, una máscara para levantarte la pestaña y otros productos infalibles para transformar tu mirada.
Vamos por partes que la noche ha sido ‘movidita’. Lo primero, quitarte los ‘legañones’ lavándote la cara con agua fresquita y empezar tu ritual de cuidados diario con una limpieza facial en profundidad, seguida de la aplicación de un tónico. Vale, ya lo has hecho, y las bolsas y ojeras siguen igual. ¿Pero qué esperabas? Ahora es el turno del sérum y del contorno de ojos. Prueba con el contorno de la gama Revitalift Laser de L’Oréal Paris que hidrata y tonifica la zona, deshincha las bolsas, rellena las arrugas y tensa los párpados. Ya solo te queda la crema, un té para cargarte de energía y ¡a comerte el día!
Iluminar la mirada es primordial, pero el resto de la cara también es importante. Unificar el tono y camuflar las imperfecciones será el segundo paso para lograr ese buen color y aspecto saludable que te ha robado —sin piedad— la falta de sueño. Para esta misión, te recomendamos la base de maquillaje Accord Parfait de L’Oréal Paris. ¿Por qué? Muy sencillo, porque calca el tono —y el subtono— de tu piel y todos sus matices, es hidratante, muy fluida y no deja efecto máscara. Además, ahora la tienes en 48 tonos —es imposible que no encuentres el tuyo ideal— y con una fórmula renovada que incluye ácido hialurónico para mejorar la calidad de tu piel.
Pero no perdamos el foco. También es fundamental que te apliques el corrector de la misma gama —si es un tono más claro mejor que mejor— para aportar luz a tus ojos y disimular los signos de fatiga.
Jugar con las luces y las sombras hará que te sea más fácil resaltar lo que quieres. Para que todo el trabajo que hemos hecho antes no quede demasiado plano, ¡tira de polvos bronceadores! Coge el producto con una brocha y dibuja un tres en tu rostro que empiece por la frente, haga la curva debajo de los pómulos y baje bordeando la mandíbula. En las manzanitas de las mejillas difumina un colorete luminoso en dirección ascendente, hasta llegar casi a la sien. ¿Qué te parece optar por un dúo de colorete y bronceador? Descubre Chérie on the cake de L’Oréal Paris y vuelve a 'morenearte' en un momento.
Para iluminar tu mirada, extiende una pequeña cantidad de producto debajo del arco de la ceja —donde el hueso—, en el centro del párpado móvil, en el lagrimal y en la parte alta del pómulo —tendiendo hacia la sien pero sin llegar— que, aunque no lo creas, es uno de los mejores trucos para iluminar el ojo. Si eres novata en esto, te aconsejamos que empieces por formatos líquidos que son más fáciles de trabajar. Las gotas Wake Up and Glow de L’Oréal Paris vienen con un aplicador de pipeta superpreciso. Apunta: el tono Melon Dollar Baby es perfecto para dar con ese dorado jugoso que tanto nos gusta.
El toque final para completar este maquillaje iluminador es echar mano de una máscara de pestañas que agrande el ojo y simule que está más despierto que nunca. Mira para abajo y aplícate con un movimiento en zigzag la máscara de pestañas Bambi Eye de L’Oréal Paris. Su nombre lo dice todo; tus pestañas se parecerán a las del famoso cervatillo que nos hizo llorar casi tanto como Mufasa —y ya es decir—.
¿Te mueres por más tips? Pues nunca, nunca, perfiles de negro la línea de agua —ópticamente tu ojo parecerá más pequeño— y a la hora de aplicarte las sombras de ojos recurre a la técnica del degradado: colores más oscuros en la zona exterior del párpado móvil y más claritos en la interior. En el lagrimal también puedes usar la sombra de ojos a modo de iluminador. Los tonos cobrizos, plateados o dorados —por no hablar de los acabados glitter— además de estar arrasando, aportan luz por un tubo.
En resumen, aprende a iluminar tu mirada y parecerás más fresca que una lechuga habiéndote levantado como una alcachofa. ¡Menudo mérito!
Te levantas y no ha sido tu mejor noche —o lo mismo sí, pero no has descansado lo suficiente— y tienes una reunión, una entrevista o un día completito en el que quieres estar guapa sin que la fatiga presida tu cara. Pues claro y en botella. ¡Vamos a preparar un neceser de emergencia! Necesitas: un contorno de ojos que te devuelva la dignidad, unas gotas iluminadoras, una máscara para levantarte la pestaña y otros productos infalibles para transformar tu mirada.
MAQUILLAJE ILUMINADOR PARA ‘BAD FACE DAYS’
Un bad face day lo tiene cualquiera pero ya no hay excusas para no solucionarlo desde primera hora del día. 20 minutos y te dejamos a punto. ¿Nos los concedes?Un contorno de ojos y un té, por favor
Vamos por partes que la noche ha sido ‘movidita’. Lo primero, quitarte los ‘legañones’ lavándote la cara con agua fresquita y empezar tu ritual de cuidados diario con una limpieza facial en profundidad, seguida de la aplicación de un tónico. Vale, ya lo has hecho, y las bolsas y ojeras siguen igual. ¿Pero qué esperabas? Ahora es el turno del sérum y del contorno de ojos. Prueba con el contorno de la gama Revitalift Laser de L’Oréal Paris que hidrata y tonifica la zona, deshincha las bolsas, rellena las arrugas y tensa los párpados. Ya solo te queda la crema, un té para cargarte de energía y ¡a comerte el día!
La base de maquillaje a veces es un ‘must’
Iluminar la mirada es primordial, pero el resto de la cara también es importante. Unificar el tono y camuflar las imperfecciones será el segundo paso para lograr ese buen color y aspecto saludable que te ha robado —sin piedad— la falta de sueño. Para esta misión, te recomendamos la base de maquillaje Accord Parfait de L’Oréal Paris. ¿Por qué? Muy sencillo, porque calca el tono —y el subtono— de tu piel y todos sus matices, es hidratante, muy fluida y no deja efecto máscara. Además, ahora la tienes en 48 tonos —es imposible que no encuentres el tuyo ideal— y con una fórmula renovada que incluye ácido hialurónico para mejorar la calidad de tu piel.
Pero no perdamos el foco. También es fundamental que te apliques el corrector de la misma gama —si es un tono más claro mejor que mejor— para aportar luz a tus ojos y disimular los signos de fatiga.
Colorete + bronceador = dúo ganador
Jugar con las luces y las sombras hará que te sea más fácil resaltar lo que quieres. Para que todo el trabajo que hemos hecho antes no quede demasiado plano, ¡tira de polvos bronceadores! Coge el producto con una brocha y dibuja un tres en tu rostro que empiece por la frente, haga la curva debajo de los pómulos y baje bordeando la mandíbula. En las manzanitas de las mejillas difumina un colorete luminoso en dirección ascendente, hasta llegar casi a la sien. ¿Qué te parece optar por un dúo de colorete y bronceador? Descubre Chérie on the cake de L’Oréal Paris y vuelve a 'morenearte' en un momento.
Luz aquí, luz allá. ¡Te queremos, iluminador!
Para iluminar tu mirada, extiende una pequeña cantidad de producto debajo del arco de la ceja —donde el hueso—, en el centro del párpado móvil, en el lagrimal y en la parte alta del pómulo —tendiendo hacia la sien pero sin llegar— que, aunque no lo creas, es uno de los mejores trucos para iluminar el ojo. Si eres novata en esto, te aconsejamos que empieces por formatos líquidos que son más fáciles de trabajar. Las gotas Wake Up and Glow de L’Oréal Paris vienen con un aplicador de pipeta superpreciso. Apunta: el tono Melon Dollar Baby es perfecto para dar con ese dorado jugoso que tanto nos gusta.
No te cortes, el pestañón nunca sobra
El toque final para completar este maquillaje iluminador es echar mano de una máscara de pestañas que agrande el ojo y simule que está más despierto que nunca. Mira para abajo y aplícate con un movimiento en zigzag la máscara de pestañas Bambi Eye de L’Oréal Paris. Su nombre lo dice todo; tus pestañas se parecerán a las del famoso cervatillo que nos hizo llorar casi tanto como Mufasa —y ya es decir—.
¿Te mueres por más tips? Pues nunca, nunca, perfiles de negro la línea de agua —ópticamente tu ojo parecerá más pequeño— y a la hora de aplicarte las sombras de ojos recurre a la técnica del degradado: colores más oscuros en la zona exterior del párpado móvil y más claritos en la interior. En el lagrimal también puedes usar la sombra de ojos a modo de iluminador. Los tonos cobrizos, plateados o dorados —por no hablar de los acabados glitter— además de estar arrasando, aportan luz por un tubo.
En resumen, aprende a iluminar tu mirada y parecerás más fresca que una lechuga habiéndote levantado como una alcachofa. ¡Menudo mérito!
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