Cómo cuidar un pelo con mechas en 5 pasos imprescindibles

Conocemos el nombre de un montón de tipos de mechas diferentes y nos declaramos “fans” absolutas de la mayoría de todas ellas ahora bien, poniéndonos serías, una cosa es llevarlas y otra es llevarlas al 100%. ¿Sabrías decirnos cómo se cuida un pelo con mechas? Nutrir y matizar van a ser dos acciones muy clave de la rutina que vamos a contarte; pero hay bastantes más.

CÓMO CUIDAR LAS MECHAS NIVEL ‘SENTIRTE ORGULLOSA’

Lo que te decíamos arriba; puede que te declares mechas lover y que a la vez mantenerlas no sea tu fuerte. Por si acaso, aquí va un paso a paso para que lo vuestro sea una historia de amor de las de verdad y no solo un flechazo.
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1

Cuidado específico

Un cabello con mechas a efectos prácticos es un cabello teñido, por lo que todos los productos que utilices deben ser específicos para esta condición capilar. Necesitas nutrición, hidratación y proteger tu nuevo tono —entre otros requerimientos— y la gama Elvive Color Vive de L’Oréal Paris está completamente enfocada a escudar tu cabello y a fijar el color. Tómatelo como si tu melena estuviera atravesando una etapa “especial” en la que te necesita como nunca y cuídala a tope.
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2

Momento lavado

Lavarte el pelo sabes, no tenemos ninguna duda, pero lee atentamente por si se te estaba escapando algo:

  • Utiliza agua templada para lavar y más bien fresquita para aclarar.
  • Aplícate el Champú Protector Elvive Color Vive a través de un masaje en el cuero cabelludo. Así activarás la microcirculación y favorecerás que los ingredientes de la fórmula penetren mejor en la fibra capilar. 
  • El acondicionador no es una opción en los cabellos con mechas, es un deber. Cierra la cutícula, aviva el color, aumenta los reflejos y, además, el de esta línea en concreto tiene filtros UV para proteger tu cabello del sol. 
  • Un lavado sí, un lavado no, recurre a la mascarilla protectora para preservar el brillo y la suavidad de tu pelo y, por supuesto, prolongar la intensidad del color. Puedes repartirla con los dedos a modo de rastrillo o con un peine de púas anchas y, cuando la utilices, no hace falta que emplees el acondicionador.
  • Mención especial para la gama Elvive Color Vive Violeta si llevas mechas rubias muy claras —bastantes frecuentes, de hecho—, grisáceas o incluso blancas. Te ayudará a mantener a raya los reflejos amarillentos o anaranjados. Utilízala solo una vez a la semana y compleméntala con la gama anterior el resto de días. 
  • Si te vas de viaje, te duchas en el gym o por si acaso te está empezando a invadir el pensamiento de “no tengo tiempo”, nos hemos escondido un as bajo la manga: Más que un Champú Elvive Color Vive de L’Oréal Paris. Un champú en crema con textura de mascarilla que va ultraconcentrado en lípidos nutritivos y que limpia, cuida y se preocupa por el color. Si quieres saber más detalles de uso, no lo dudes y haz clic en la ficha de producto que tienes debajo.
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3

Empieza a peinarte por las puntas

La mecha tiene una textura diferente al resto del pelo y, aparte de necesitar más mimos, se enreda con mirarla. Si mantienes el régimen de cuidados que acabamos de detallarte, tu melena te resultará sencillísima de peinar —para eso están el acondicionador y la mascarilla—, pero aún así te recomendamos que siempre empieces por las puntas, muy suavemente, y luego vayas subiendo. ¡No queremos romperla!
PASO
4

Mantén a raya al sol y al calor

Si no puedes vivir sin secador o plancha, al menos intenta utilizarlos a temperatura media y siempre con un protector térmico de la mano. Cuando acabes, premia a tu cabello con unas gotas de aceite para reponer la hidratación que se te haya podido quedar por el camino. Extiéndelo de medios a puntas. 

Respecto al sol, ya sabes que siempre debes resguardar tu melena, pero si encima tienes el cabello teñido, no te queremos ni contar. Sombreros, pañuelos y una bruma con SPF completarán la protección que te brindan los filtros UV y aceites presentes en la gama Color Vive.
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5

Corta periódicamente

Las puntas de las mechas se abren, resecan y estropean con más facilidad que el resto del cabello, y esto se acentúa en las melenas XL. Al margen de los cuidados diarios, conviene adelantar su saneamiento y cumplir con él cada dos meses para evitar que el daño suba hacia arriba.

¿Lo ves? Cómo cuidar un pelo con mechas no es nada complicado. Y cuando seas testigo de la diferencia y te des cuenta de lo bien que responden tus reflejos, ¡mucho menos! Recuerda: hidratación, protección del color y a brillar.